La manía de Hollywood de sustituir originales ideas (así como tiempo y un buen número de dolares) por remakes, no le suele dar buenos resultados, odiosos en ocasiones. Por contra, en este pseudo-remake (cerca de una secuela) de Tron, parece ir por buen camino. Dejando una tintada y mortífera estela a su paso.Jeff Bridges, con 20 años más a la espalda, regresa a la figura de Flynn, un hacker cuya primera experiencia a los mandos de virtuales motos vanguardistas se configuró en plena era pre-Internet. De la que, por cierto, muchos desconfiaban. Hoy día, la realidad paralela ha despejado aquella gran tormenta de dudas y permitirá disfrutar, con suerte en el 2010, de un gran mito de la ciencia ficción cinematográfica: padre (Flynn) y su hijo, se reencuentran en una renovada "Ciudad Tron" donde el arcade bidimensional resucita entre circuitos corroídos para ofrecernos una espectacular odisea. Un juego cardiaco, por momentos no tan juego, done hace falta algo más que velocidad para sobrevivir...
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