Mientras recorro las playas que no conozco, mientras escucho la endecha, las voces de los hombres y mujeres náufragos, mientras aspiro las brisas impalpables que me asedian, mientras el océano, tan misterioso, se aproxima a mi cada vez más, yo no soy sino un insignificante madero abandonado por la resaca, un puñado de arena y hojas muertas... y me confundo con las arenas y con los restos del naufragio.
miércoles, 30 de junio de 2010
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13 comentarios:
Los maderos que aparecen en la playa cuentan mil y una historia de nereidas, sirenas y musas encontradas a su paso.
Un simple madero, o no. Elemento que quizá pase desapercibido, pero cada parte es importante dentro de ese paisaje que describes y nos muestras en idílicas imagenes. Me pido concha depositada en esa arena :)
Muack!
Buenas olas y un mar transparente.
Esas maderas, creo que todos coincidimos en esto, tienen mil historias y son parte de esta historia diaria.
Un abrazo
Hasta un cascarón de acero barado tiene su encanto. Pero un madero desprende ese olor a viejo, a sabiduria marítima de mil y un viajes, finalmente acabados con en una tempestad, en unas rocas, o devorado por los años. Me uno a vosotros, naufragos de la red. Un abrazo salado, siempre es un placer encontraros entre estas olas.
Que chulada de olas y surferos, ajaj Lo de los tiburones ya no mola tanto... El video se ve con la angustia que la música agudiza... acojonante, jaaj
Y qué decir de Whitman, que "Hojas de Hierba" está siempre en mi mesilla... jaja
Bezos.
El sabor a sal que dejan estas olas me es inconfundible e inolvidable... :) sobre el madero a la deriva o no...yo veo a un hombre tallándolo, uno al que no le importan las horas, ni el clima, ni el futuro, ni los porqués...un hombre que hace de esa madera...su propio banco... ;)
Besos todavía salinos...
Arwen
simple y llanamente son lacayos encargados de ayudar en varias cosas como bajada de los pasajeros, sujetar los caballos cuando se para el carruaje , auxiliar ante cualquier percance.... son útiles, incluso pueden servir el te como bien dices.
Thiago... para mí esa musica es imprescindible en el video y le da ese aire trascendtal, que hasta los tiburnes parecen inofensivos. La poesía no es lo mío, pero de Whitman he leído muchos poemas, creo que la mayoría de ese "Hojas de Hierba" que mencionas, una maravilla. ABrazos!
Arwen, creo que podríamos meter el banco dentro de la suite presidencial, pero vigila al "hombre" que lo mismo se te bebe todo el mini-bar... yo lo que veo es la naturaleza regalandonos sus recursos, un roble enorme padre de todos esos maderos. Besikos!!
Bell, si es que un madero puede valer hasta como barca en sí mismo, eso sí, para un pasajero nada más... abrazos!
Ja,ja,ja...eres un ecanto...eso de "la suite presidencial" me ha llegado :D, me llevaré al hombre del banco conmigo, nunca se sabe cuando me va a hacer falta...ja,ja,ja...pero shhhhhh no se lo digas a nadie...xD y tranquilo porque guardo en un sitio secreto la llave del mini-bar... ;P
Besotes y disfruta muchoooooo del glorioso fin de semana...(yo me acercaré hoy a comer junto a las olas...y si veo un madero seguro que me acuerdo de ti...je,je...) y esta noche extiendo las alas y a volarrrrr.....
Muchos besossssssssss
Arwen
como una cabra.... pero me gusta
Jaja, hola Pau, bienvenido a la granja de cabras locas fanáticas de la música y la cultura en genral, aunque tengan unas pezuñas de espanto tienen la punta justa para escrbir en un teclado y decir todo tipo de locuras... pero de las sanas y curiosas (o eso creo yo):
Que tu estancia por aquí sea lo más acogedora posible, y no te dejes llevar mucho por la oscuridad, que aveces es adictiva. Mejor quedate en la luz ;) un abrazo!
Serguei (un amigo) dice que "madero" en la cárcel significa algo malo, los maeros no molan en los chabolos. Pero que le ha encantado, incluso por eso, el vídeo y la música. A mí por supuesto que mucho también.
Prefiero invitarte a un barco como el de Arthur, que anda siempre borracho con las olas.
Mis disculpas a Serguei... mis maderos son inhertes, pero llevan mucha historia dentro... pero los años les pasan como una lijadora, jaja. Y que no eche el ancla el barco de Arthur, que nadando me subiré a él, y beberemos el agua de mar juntos S S S S
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